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La gran familia del CD Ilunion

Autor: José Manuel Martín Amigo.

Todos caben en ella. No hay ningún límite, incluyendo el de edad. El único requisito que piden es disfrutar del juego. La Escuela de Baloncesto en Silla de Ruedas del Club Deportivo Ilunion lleva despertando sensaciones deportivas desde hace nueve años en personas con y sin discapacidad que han decidido jugar en silla de ruedas en una cancha.

El próximo mes de junio acabará el curso actual en el que 40 inscritos, que van desde los 3 años hasta casi los 50, han disfrutado cada viernes de una hora de deporte en el pabellón del Colegio San Agustín de Madrid. Pero esto no acaba aquí, porque como explica a Vidas Insuperables Miguel Vaquero, uno de los entrenadores del club, el que juega una temporada repite.

“Hay gente de 30 años que nunca había jugado antes a baloncesto en silla de ruedas. Ha venido, se ha sentado, lo ha probado y ha empezado a jugar sin ningún problema”, dice Vaquero que, junto a Vicky Pérez y José Manuel Conde, llevan a este grupo que funciona como cualquier equipo de baloncesto aunque no compite ya que actualmente no existen grupos suficientes en España para formar una liga.

Tres grupos con una misma ilusión

Cada viernes, al comenzar la hora de entrenamiento todos los componentes de la escuela se juntan para realizar el calentamiento previo a los ejercicios. Vidas Insuperables ha sido testigo de este ejercicio en el que todos los jugadores desprenden alegría y motivación a través de sus caras y del empeño que ponen dentro de la cancha.

Una vez finalizado el calentamiento se dividen en tres grupos, dependiendo de las capacidades motrices que tenga el jugador. “El primer grupo lo conforman los más pequeños que juegan en canastas de Babybasket. El grupo intermedio, que lo hace en las de MiniBasket, son adultos que por sus capacidades motrices no les permite llegar a una canasta grande. Y por último el equipo de los mayores, que bien por edad o por características funcionales, pueden jugar en una normal”, dice Vaquero.

Esta distribución en tres grupos se basa en la filosofía de la escuela: cualquiera puede jugar al baloncesto en silla de ruedas. Participar en este proyecto no tiene coste económico, ya que la Fundación ONCE subvenciona las sillas deportivas que se prestan a los participantes y la equipación para que puedan hacer la actividad como si fuese un equipo.

“Tenemos un proceso de recepción de chicos. Hacemos un proceso de bienvenida en el que rellenamos con el chico o chica y su familia una ficha de inscripción y a la hora de hacer el entrenamiento le presentamos al equipo y realizamos un acercamiento progresivo con el grupo que le corresponda. El objetivo principal es que aprendan divirtiéndose”, añade el entrenador.

“Siempre hay un plan B para no tirar la toalla”

Para Vicky Pérez, entrenadora de la escuela y jugadora del CD Ilunion, esta actividad supone el regalo de la semana en la que puede enseñar a los ‘pequeños’ jugadores técnicas que utilizan en el primer equipo. Pérez, que ha jugado desde niña al baloncesto, se subió por primera vez a una silla de ruedas en la cancha a los 22 años después de una lesión que tuvo a los dieciséis.

“En las charlas que doy en los colegios siempre les cuento mi caso. Yo jugaba al baloncesto a pie y quería ser jugadora profesional, me lesioné y ya no podía serlo y al final dando vueltas e intentándolo por todos los medios lo he conseguido. De otra manera porque estoy sentada en una silla pero lo he conseguido. Les transmito que siempre hay un plan B. Que lo busquen, que seguro que lo encuentran”, manifiesta la entrenadora.

Otro de los retos que la jugadora tiene es que se alcance la igualdad plena en el terreno de juego. Un aliciente para que eso sea una realidad en los próximos años ya está presente en la escuela: que haya un alto porcentaje de jugadoras femeninas en los equipos de los que serán las futuras promesas.

“Es un trabajo que llevamos haciendo desde hace mucho tiempo. Se ha intentado y fomentado con mucha fuerza porque somos muy poquitas en los equipos, pero la realidad es que esto es a largo plazo. Si empieza ahora esperemos que cuando yo me retire de este deporte haya una igualdad absoluta. Sería maravilloso y me sentiría orgullosa de haber aportado ese granito de arena”.

Pendientes de la Liga

Fuente: CD Ilunion.

Después de ser por sexta vez subcampeones de Europa, este fin de semana los jugadores del CD Ilunion se medirán de nuevo en las canchas para luchar por la copa de la Liga en una temporada que ha ido mejorando según han ido pasando las jornadas. José Manuel Artacho, entrenador del equipo, explicaba hace unas semanas a Vidas Insuperables que “mantener ese nivel año tras año es muy complicado, pero la exigencia y la ambición del club queda patente”.

Y aunque empezaron con mal pie, actualmente están los segundos de la tabla, demostrando de nuevo la fuerza y unidad que cada temporada reside en el equipo. “La rueda al final rueda de verdad y va en el camino correcto. Es muy complicado mantener lo que hemos conseguido en las temporadas anteriores y es un trabajo duro, pero ahí estamos”, concluye Vicky.

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