Instituciones Penitenciarias difunde un protocolo de actuación con personas con discapacidad en centros penitenciarios, en el que han participado Plena Inclusión, ONCE, CNSE, Fiapas, Cocemfe o FASOCIDE.
La inclusión sigue abriéndose camino en todos los ámbitos de la sociedad, incluidas las prisiones. Plena Inclusión, ONCE, CNSE, Fiapas, Cocemfe o FASOCIDE han participado en la elaboración del «Protocolo de actuación para personas con discapacidad en centros penitenciarios», que acaba de difundir Instituciones Penitenciarias.
Esta iniciativa da respuesta a las necesidades de las personas con discapacidad que acceden a prisión. Según la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, este protocolo responde al articulado de la Convención de la ONU sobre los derechos de personas con discapacidad, que obliga a acabar con las barreras que impiden la plena y efectiva participación de estas personas en la sociedad.
En ese contexto, estas entidades han tratado de identificar y eliminar esas barreras «con el objetivo de abrir el camino hacia la accesibilidad y, a través de ella, permitir la oportunidad de participar en todo aquello que el medio penitenciario pueda ofrecer a los internos, ayudando en su desarrollo personal y en su trayectoria vital».
El protocolo será difundido a todos los centros penitenciarios del país para el conocimiento y puesta en práctica por todos los empleados y empleadas de estos centros.
Según Plena Inclusión, en el caso de las personas con discapacidad intelectual, este trabajo contiene algunas pautas para facilitar la comunicación con personas con discapacidad intelectual o del desarrollo, así como un cuestionario sencillo para poder detectar este tipo de discapacidad entre la población reclusa. Algo muy importante para esta asociación, puesto que se calcula que el 70% de las personas con esta discapacidad en prisión, fue detectado una vez en las prisiones.