La mediación intercultural, un pilar para combatir la exclusión social
La inmigración es un reto y una oportunidad para la sociedad actual. Un contexto en el que la mediación intercultural se está erigiendo como una herramienta idónea para la inclusión social.
“Solo le di un abrazo”, esas han sido las declaraciones humildes que Luna Reyes Segura ha repetido una y otra vez a los medios de comunicación tras la imagen solidaria, cargada de humanidad y emotiva que dio la vuelta al mundo hace unas semanas.
“Lloraba, le tendí la mano y me abrazó. Se pegó a mí como una lapa. Ese abrazo fue su salvavidas. Me hablaba en francés y enumeraba con los dedos de la mano. Yo no entendía nada, pero estoy convencida de que estaba enumerando los amigos que ha perdido en el camino”, ha declarado Luna a los medios.
Pero esa humildad y sencillez no quita para que el abrazo de esta voluntaria de Cruz Roja con un joven migrante acaparase todas las portadas y se convirtiera en una fotografía icónica de una nueva crisis migratoria. Pero detrás de ese gesto hay un grave drama humano que resolver.
En la sociedad que vivimos, nos podemos encontrar con situaciones de exclusión social de toda índole, como en el entorno de las personas mayores o de las personas con discapacidad, y, por supuesto, aquellas movidas por culturas, etnias, e incluso por formas de pensar y actuar.
Mediador intercultural
Municipios españoles muy populosos como Móstoles (Madrid) son un reflejo de una gran Torre de Babel, en la que conviven más de 210.000 personas de más de 100 nacionalidades distintas. Se trata de toda una oportunidad de enriquecimiento intercultural pero a la vez de un reto para las administraciones para lograr una argamasa social donde la convivencia y el respeto sea la guía del latir de la sociedad.
En ese contexto, y ante el hecho de que la inmigración se ha convertido en una de las mayores problemáticas en todo el mundo, el papel del mediador intercultural se está erigiendo como un pilar fundamental en este marco social.
Formación homologada
Buscando todos esos objetivos, se abren paso con fuerza los Cursos en Mediación Intercultural, aunque es importante acudir a aquellos centros que ofrecen una formación homologada avalada por universidades de referencia.
Gracias a estos cursos se pueden adquirir los conocimientos y competencias profesionales para mediar ante una situación de inclusión o exclusión social. Sus participantes se convierten en expertos en conceptos como inmigración, multiculturalidad, resolución de conflictos, mediación comunitaria e intercultural, y así como de las herramientas y recursos necesarios para ser un buen mediador intercultural.
Los Cursos en Mediación Intercultural están dirigidos especialmente a trabajadores sociales, educadores sociales, antropólogos sociales, psicólogos, y así como hacia cualquier persona que esté desee formarse en esta rama de la inmigración.
