CERMI acerca testimonios en primera persona del horror de la guerra. Entre el 5 y el 8% de las personas que huyen de Ucrania tienen algún tipo de discapacidad. “Es fundamental proteger a las mujeres y niñas con discapacidad ucranias que cruzan la frontera”.
La guerra de Ucrania ha dejado sin protección a 2,7 millones de ucranios con discapacidad. Ante esta situación, la Fundación CERMI Mujeres ha puesto de relieve la necesidad de validar, acreditar y reconocer el grado de discapacidad de las mujeres y niñas con discapacidad ucranias que cruzan la frontera.
El objetivo es que puedan gozar de todos los derechos al llegar a España o a otro país. Al mismo tiempo, desde CERMI Mujeres se pide intensificar la protección de las mujeres y niñas con discapacidad y de las madres de hijos e hijas con discapacidad de Ucrania, que tienen un riesgo mayor de sufrir violencia o de caer en redes de trata y explotación sexual, y buscar soluciones para este grupo social que huye de la guerra.
Además, esta institución ha denunciado la falta de medicamentos que precisan algunas personas con discapacidad y las dificultades que enfrentan por requerir de una autorización o receta; los obstáculos que sufren para acceder al agua, a alimentos y a refugios seguros y accesibles; la imposibilidad de recibir ayuda humanitaria en el terreno en las zonas más afectadas por la guerra.
En primera persona, la Fundación benéfica “Z teplom u sertsi» (Con calor en el corazón) de Ucrania ha ofrecido los testimonios de madres de hijos con discapacidad de Ucrania. Es el caso de Catherine, desde Polonia quien ha analizado la situación que viven las mujeres con discapacidad en Ucrania tanto antes de la guerra como en el presente, y ha puesto el acento en el acceso a medicinas.
En el caso de Irina, se encuentra huyendo de su país con un hijo que tiene parálisis cerebral. “En estas condiciones, el desplazamiento se hace más difícil, limitado y peligroso”, ha lamentado. Asimismo, Irina ha denunciado los problemas médicos y la escasez de medicamentos en ucrania.
Mientras, Shantal, desde Suecia, madre de un hijo con discapacidad, ha confesado que las personas con discapacidad tienen dificultades para escapar de la guerra.
El trabajo de ACNUR
En este contexto, Gillian Triggs, Alta Comisionada Adjunta para la Protección de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), se ha referido al trabajo de ACNUR desde una perspectiva de género y discapacidad. “Desde ACNUR, hemos establecido el punto azul, un lugar seguro de llegada en el que las personas con discapacidad pueden acceder a información y encontrar apoyos específicos, ha comentado.
Triggs ha confesado que otro de los temas que preocupa especialmente a ACNUR es el abuso sexual y la trata de personas. “No tenemos datos, pero hay pruebas e informes de depredadores que están en las fronteras para abusar de las personas más vulnerables, entre las que se encuentran las mujeres con discapacidad” ha finalizado.
Por su parte, Larysa Bayda, representante de la Asamblea Nacional de Personas con Discapacidad de Ucrania ha asegurado que “la situación de las personas con discapacidad en Ucrania, particularmente la de las mujeres y niñas, es crítica”. Larysa ha subrayado que la Asamblea Nacional está colaborando con distintas entidades y con organizaciones internacionales para ofrecer ayuda humanitaria a las personas con discapacidad, y ha hecho un llamamiento para que esta ayuda atienda verdaderamente las necesidades que presentan las personas con discapacidad, la mayoría de las cuales están aisladas y olvidadas en las medidas de supervivencia. “Las agencias internacionales no están trabajando en las zonas ocupadas. De modo que, problemas como la entrega de medicamentos, se solucionan desde las organizaciones de la sociedad civil no gubernamentales. Desde la Asamblea estamos trabajando para establecer sistemas de apoyo y comunicación”, ha enfatizado.
Además, ha hecho un llamamiento para que las diferentes organizaciones que luchan por los derechos de las personas con discapacidad de todos los países sumen esfuerzos y se proceda a una coordinación “de inmediato”.
ONGs en el terreno
En este punto, ha coincidido con la representante de la ONG «Mujeres y niñas con discapacidad del Donbas del norte”, Anhelina, quien ha expuesto que “es fundamental trabajar conjuntamente para encontrar refugios o alejamiento adaptados a las necesidades de las personas con discapacidad. Asimismo, durante su intervención, Anhelina ha señalado las demandas y necesidades de las mujeres y niñas con discapacidad en Ucrania, como la escasez de alimentación, medicamentos, productos de higiene y acceso a refugios con baños seguros y accesibles.
Desde el terreno, la presidenta de «LOO «AMI-EAST” (Asociación de Mujeres, Jóvenes, Familias con Discapacidad del Donbas del este), Tetiana Barantsova, ha advertido de la importancia de contar con apoyos y lugares accesibles para asegurar su protección. “Agradecemos participar en este seminario porque ya sabemos que no estamos solas”, ha agradecido.
La directora del Foro Europeo de la Discapacidad (EDF), Catherine Naughton, ha presentado el trabajo que desde esta plataforma europea se está haciendo ante la Unión Europea, las agencias especializadas de Naciones Unidas y junto a sus miembros nacionales, particularmente los consejos nacionales de discapacidad de los países fronterizos, para con las personas con discapacidad ucranianas. En ese sentido, ha comentado el trabajo que se está haciendo para ofrecer apoyos inclusivos para las personas con discapacidad. “Es necesario que las organizaciones de mujeres con discapacidad intensifiquen su trabajo en esta área. Desde el EDF estamos en contacto con Naciones Unidas para hacerles entender la situación de las personas con discapacidad”, ha concluido.
“Desbordados”
Desde el Foro Polaco de Discapacidad, Adam Zawisny, ha exigido la creación de “apoyos sensatos”. “Garantizar que las niñas y mujeres que crucen la frontera reciban un apoyo sistémico, inclusivo y accesible es una prioridad real. Según los datos del Foro Polaco, entre el 5 y el 8% de las personas que huyen de Ucrania tienen algún tipo de discapacidad. En Polonia estamos desbordados con esta situación y nos sorprende que el Gobierno no perciba esta necesidad como una cuestión importante”, ha puntualizado.
El presidente de la Comisión de Cooperación Internacional del CERMI, José Luis Martínez Donoso, ha puesto el foco en el trabajo que se está realizando para poder garantizar una correcta atención a las personas con discapacidad que lleguen a nuestro país como refugiadas. “Desde CERMI, hemos constituido una Comisión de emergencia para Ucrania y una de nuestras prioridades es que se produzca de inmediato la homologación de la discapacidad porque “sin este derecho, tenemos grandes dificultades para actuar”. Además, desde el Grupo Social ONCE se está trabajando con organizaciones españolas de ayuda humanitaria y con el Ejército para llevar ayuda al terreno para las personas con discapacidad.
La situación de las personas con discapacidad de Ucrania en tránsito y los problemas de movilidad y transporte a los que se enfrentan han sido expuestos por la presidenta de la plataforma de organizaciones representantes de las personas con discapacidad de Letonia (SUSTENTO), Gunta Anca, quien ha llamado al trabajo en red que se debe hacer para con las personas con discapacidad que huyen de Ucrania.
Desde la administración central, el subdirector General de Diálogo Civil de la Dirección General de Políticas de Discapacidad del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, Francisco Javier Rebollo, ha explicado los primeros pasos de la Administración Central en favor de las personas con discapacidad procedentes de Ucrania
Regularización legal
“Urge la rápida regularización legal para que las niñas y mujeres con discapacidad puedan acceder a todos los servicios que tienen por derecho” ha instado. Tras agradecer la profunda y absoluta implicación de CERMI con las personas con discapacidad, ha mostrado su compromiso por atender lo mejor posible a las personas con discapacidad que provienen de Ucrania”