Más de mil perros guía permiten a las personas ciegas seguir siendo autónomas durante el confinamiento. La Fundación ONCE del Perro Guía pide a la sociedad que ayude a las personas ciegas y sus perros a guardar la distancia de seguridad.
Desde la entrada en vigor del estado de alarma por el COVID-19, los perros guía también se quedan en casa y sólo salen a la calle para acompañar a las personas ciegas a cubrir sus necesidades básicas, como realizar la compra en un supermercado, adquirir medicamentos en una farmacia o asistir a una consulta médica. Siempre lo hacen con el arnés que los identifica como perros guía, y sin acercarse a otros perros ni sus propietarios.
Ante esta situación la Fundación ONCE del Perro Guía (FOPG) recuerda que ni las personas ciegas ni sus perros tienen capacidad de conocer la distancia de seguridad recomendada por las autoridades (2 metros) para evitar posibles contagios. Por ello pide ayuda a la ciudadanía para que, en distintas situaciones diarias, les indiquen mediante la voz y no el tacto, la zona correcta que permita cumplir con la normativa vigente.
Además, la FOPG quiere reconocer la labor desinteresada de las cerca de 250 familias educadoras de cachorros o cuidadoras de los ejemplares reproductores que, ahora más que nunca, contribuyen con su colaboración a la importante tarea de lograr que las personas ciegas de nuestro país tengan la opción de contar con un perro guía que mejore su movilidad.
Tres décadas de perros guía
La ONCE creó la Fundación del Perro Guía hace más de treinta años, adoptando el modelo de las escuelas de perros guía europeas y norteamericanas.
Ubicadas en Boadilla del Monte (Madrid), sus actuales instalaciones cuentan con 110.000 metros cuadrados que dan cabida a todos los servicios: crianza, alojamiento y cuidado de cachorros, entrenamiento e instrucción de perros, clínica veterinaria, albergue para perros jubilados y residencia para la formación de los usuarios de perro guía.
En su trayectoria la Fundación ONCE del Perro Guía ha facilitado más de 3.000 perros a las personas ciegas o con discapacidad visual para mejorar su autonomía, desplazamientos y seguridad, convirtiendo a estos animales en un vecino más.
Las razas más utilizadas son labrador retriever, golden retriever, pastor alemán y flat coated retriever. Cabe destacar que las leyes reconocen el derecho de los usuarios a deambular y permanecer, acompañado de su perro guía, en transportes y lugares públicos o de uso público.