Hasta el 17 de mayo se puede visitar en Madrid la exposición, “Siento, luego Existo”, impulsada por Plena Inclusión Madrid, Fundación Repsol y la Escuela de Arte Francisco Alcántara.
Fruto del trabajo desarrollado por la ceramista Isabel Alfaro en la Asociación Círvite, gracias a la residencia artística Espacio Convergente, ha surgido la exposición “Siento, luego existo”, una iniciativa impulsada por Plena Inclusión Madrid, Fundación Repsol y la Escuela de Arte Francisco Alcántara.
Hasta el 17 de mayo se puede visitar la muestra en esta Escuela, que según Ana Lozano, coordinadora de cultura de Plena Inclusión Madrid, plasma la apuesta de la Federación por la disciplina de la cerámica y sus posibilidades en el trabajo con personas con discapacidad intelectual con formación artística fuera de lo académico.
Luisa Roldán, gerente del área social de Fundación Repsol, destaca el valor de las residencias a la hora de generar sinergias entre artistas con y sin discapacidad, y visibilizar la capacidad artística del colectivo.
En esa línea, Isabel Alfaro, ceramista becada en la Residencia Espacio Convergente, subraya “los aprendizajes que tanto las personas con discapacidad intelectual como ella misma han vivido durante los meses de la residencia, y la importancia de mostrar el resultado de los trabajos en exposiciones como la que se inauguraba”.