Ubicada en el zaragozano barrio de Movera, la Granja Escuela CAI-Torrevirreina, cuyos programas impulsa por la Fundación Federico Ozanam, inserta laboralmente a personas en riesgo de exclusión social y da residencia a personas sin recursos económicos.
Entre árboles frutales, agricultura ecológica y animales de granja también se puede tener una oportunidad de revertir el destino y volver a soñar con un proyecto vital estable.
Eso es lo que les ha ocurrido a 5 personas en riesgo de exclusión social que han sido insertados laboralmente por la Fundación Federico Ozanam, a través de los programas que desarrolla en la Granja Escuela CAI-Torrevirreina, ubicada en el zaragozano barrio de Movera.
Estas 5 personas forman parte de los más de un centenar de maños que han pasado por el Centro de Formación de esta Granja, donde se imparten cursos de agricultura, carpintería, pintura y lampistería, agricultura ecológica y monitor de granja.
En paralelo, este espacio acoge, una residencia destinada a personas sin recursos económicos que necesitan un alojamiento temporal digno y acompañamiento para recuperar su itinerario vital, donde en 2017 se atendieron a 32 personas.
Apoyo económico
Estos proyectos se están llevando a cabo, entre otros, a la colaboración de las Fundaciones Ibercaja y Caja Inmaculada, que recientemente han concedido a esta Fundación una subvención de 25.000 euros para impulsar estas iniciativas.
La Granja Escuela CAI-Torrevirreina es una finca de 36.000 m2, de los que 3.500 m2 se dedican a residencia, talleres, almacenes y zona deportiva. El resto de la superficie es tierra cultivable que se utiliza también como huerto social y como espacio de actividades de granja-escuela y tiempo libre dirigidas a escolares. Desde octubre de 2008, la Fundación Federico Ozanam gestiona el centro, propiedad de Fundación Caja Inmaculada.
Un lugar donde también se dedica a la producción de verdura ecológica, que se dona al Banco de Alimentos de Aragón, y a actividades de granja-escuela en las que participan escolares.
El año pasado visitaron el centro un total de 2.087 alumnos de centros aragoneses. En estas actividades, los niños realizan tres tipos de actividades: de huerto, de granja y medioambientales, con paseos por la finca que les permiten entrar en contacto con la naturaleza y familiarizarse con el mundo rural.