Los farmacéuticos proponen realizar una prueba piloto para valorar el uso del cannabis con finalidad terapéutica.
¿Es leyenda urbana, existen evidencias científicas o simplemente es un placebo?. El debate sobre el uso terapéutico del cannabis lleva mucho tiempo en la calle pero también ha llegado a los ámbitos institucionales y de impulso de desarrollos normativos.
En este sentido, Jesús Aguilar ha destacado la imprescindible participación de la farmacia comunitaria en la dispensación de estos productos, prescritos por un médico, para una indicación concreta y con la autorización oficial de uso por la AEMPS. “La utilización de principios activos en su condición de medicamentos requiere de evidencia clínica demostrada de calidad, seguridad y eficacia, mediante la realización de ensayos clínicos, autorización de puesta en el mercado, indicaciones concretas, composición conocida, forma farmacéutica adecuada y demostración de actividad”, ha manifestado.
Así, el presidente del Consejo General ha propuesto trabajar con las autoridades sanitarias en el diseño y la realización de una prueba piloto controlada. “Dicha prueba piloto podría desarrollarse, con el correspondiente marco legal, y previamente se definirían, por la Agencia Española de Medicamentos, los requisitos que se deberían cumplir para su puesta en marcha. Lógicamente habría que definir un protocolo de actuación con las condiciones en las que se podrían prescribir estos productos, previamente autorizados para la prueba, el perfil de pacientes y médico prescriptor, así como la situación clínica y las condiciones a cumplir por las farmacias.”, ha señalado.
Aclarar los efectos
Por otra parte, en este contexto, Aguilar ha solicitado la limitación de la oferta de los productos derivados del cannabis, actualmente accesible en establecimientos no sanitarios sin control en sus indicaciones ni en su composición. “Se trata de productos con concentraciones altamente variables de derivados del cannabis y restos químicos y pesticidas peligrosos – que se utilizan en el cultivo ilegal –, exponiendo a los usuarios a riesgos para su salud. Productos que han proliferado en gran medida y que en ningún caso pueden tener indicaciones terapéuticas, pero que están generando un mercado al límite de la legalidad, y en muchos casos claramente en contra de la ley, que podemos encontrar en numerosas web y tienda franquiciadas, generando un claro engaño a los ciudadanos y poniendo en riesgo su salud”.