Pacientes de párkinson y profesionales de atención primaria, farmacia y neurología, se unen para mejorar el abordaje de esta enfermedad.
Informar y formar a profesionales de medicina de atención primaria y farmacia comunitaria en la enfermedad de Párkinson y apoyar la detección precoz de la enfermedad y optimizar su abordaje son los principales objetivos de una alianza estratégica alcanzada por cuatro entidades de referencia.
Los presidentes de la Federación Española de Párkinson, Leopoldo Cabrera, del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Jesús Aguilar, de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, José Luis Llisterri, y la secretaria de la Sociedad Española de Neurología, Teresa Moreno, en representación del presidente de la entidad, Exuperio Díez, han suscrito un acuerdo de colaboración para impulsar acciones conjuntas relacionadas con esta patología. Las acciones contemplan la creación de materiales de actuación profesional, además de sesiones formativas online.
Leopoldo Cabrera ha destacado que “este acuerdo tiene gran importancia para las personas con párkinson ya que entre, otras cosas, facilitará la detección de síntomas y el diagnóstico precoz de la enfermedad en la consulta de atención primaria, así como una atención y seguimiento más cercana y personalizada desde los profesionales de farmacia comunitaria”.
Por su parte, Jesús Aguilar, presidente del Consejo General de Farmacéuticos, ha señalado que esta inicaitiva es ejemplo de la necesaria colaboración entre los profesionales sanitarios y refleja la actitud constructiva de los firmantes”; una iniciativa a la que, por ejempló, había precedido la concienciación sobre esta enfermedad a través de 22.000 farmacias.
Además, Aguilar ha subrayado que “el farmacéutico, por su contacto diario y directo con la población, ejerce una labor fundamental en el abordaje asistencial a estos pacientes. En este abordaje la colaboración del farmacéutico permite optimizar los resultados de la terapia, tanto farmacológica como no farmacológica, con un impacto positivo sobre su calidad de vida”.
Persiguiendo estos objetivos, se realizará una Guía de actuación profesional dirigida a medicina de atención primaria y farmacia comunitaria. Este material se presentará a los farmacéuticos colegiados a través de sesiones formativas online, y se hará llegar a los diferentes profesionales a través de las distintas vías que las entidades tienen a su disposición.
Mejorar el diagnóstico
“Conocer e identificar correctamente los síntomas de esta enfermedad puede ser clave para poder mejorar los tiempos de diagnóstico y en consecuencia, la calidad de vida de los pacientes, ya que existe un periodo en el que la respuesta al tratamiento farmacológico es excelente”, ha subrayado Exuperio Díez Tejedor.
“Teniendo en cuenta que el número de afectados se duplicará en 20 años y se triplicará en 2050, es importante impulsar este tipo de iniciativas que ayuden a mejorar la detección precoz de la enfermedad y su abordaje”.
Por su parte, José Luis Llisterri, resalta la importancia de la formación de los profesionales de medicina de atención primaria en Párkinson: «Apostamos por la colaboración multidisciplinar para impulsar el conocimiento y manejo de la enfermedad con el foco puesto en las personas que padecen párkinson y en la necesaria continuidad asistencial. Los programas de formación en los que se profundiza en las características de la enfermedad y de su manejo son aspectos claves a trasladar a los profesionales sanitarios, pacientes y cuidadores. Estos programas deben enseñar a detectar empeoramiento de los síntomas, aparición de complicaciones, control de la adherencia, revisar y conciliar medicación, vigilar iatrogenia, informar sobre recursos disponibles, servicios sociales, o asociaciones de enfermos.”
El párkinson
El párkinson es una enfermedad neurodegenerativa, crónica e invalidante que afecta a más de 160.000 familias en España, de las cuales el 10% presenta la enfermedad en estado avanzado. Esta enfermedad se produce por la pérdida de neuronas en la sustancia negra, lo que provoca falta de dopamina en el organismo, sustancia necesaria para el control del movimiento.
El párkinson se presenta a través de un gran abanico de síntomas motores, como la rigidez o la lentitud, y no motores, como la depresión o los trastornos del sueño, que afectan a la calidad de vida y autonomía de las personas con párkinson.