Teleasistencia, te ayuda siempre que lo necesitas
La teleasistencia domiciliaria privada, una solución para personas mayores de 65 años, enfermos crónicos o convalecientes, personas con discapacidad o mujeres embarazadas, que son especialmente vulnerables a la soledad y al impacto social de la pandemia.
España es uno de los países del mundo con mayor proporción de casos de Alzheimer entre personas de más de 60 años, según los datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN). En concreto, un 5% de las personas de 65 años padecen esta enfermedad y en mayores de 90 años el porcentaje aumenta hasta el 40%. En ese contexto, como consecuencia del envejecimiento de la sociedad, en los próximos 20 años, se espera que la prevalencia de la demencia debida a la enfermedad de Alzheimer se doble.
Algo similar ocurre con otra patología neurodegenerativa, ya que cada día son más las personas que padecen Párkinson, la enfermedad invisible que en España afecta al menos a 160.000 personas. Y de ellas, una de cada cien mayores de 60 años tiene esta enfermedad calificada como, crónica o progresiva, según la Federación Española de Párkinson. Personas en ambas enfermedades que, en muchos casos, hacen de su hogar casi su único espacio vital.
En otro ámbito, el 15% de los adultos mayores de 60 años cuenta con algún trastorno de salud mental, según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Un sector de la población, el de personas mayores en el que ha puesto el foco el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), que ha lanzado una campaña de toma de conciencia contra la soledad forzosa o no deseada en personas con discapacidad mayores, en especial mujeres de edad avanzada.
Si a esto unimos que más de 1,8 millones de personas con movilidad reducida (74%) precisan de ayuda para salir de sus casas y alrededor de 100.000 personas (un 4%) que no disponen de esta ayuda no lo hacen nunca, según la Fundación Mutua de Propietarios en colaboración con la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (COCEMFE), es evidente que cada vez cobra mayor importancia la teleasistencia domiciliaria privada.
Teleasistencia para combatir la soledad
Un estudio que alerta sobre estas situaciones indeseadas, máxime en un periodo actual muy complejo por el coronavirus, en el que colectivos como personas mayores de 65 años, enfermos crónicos o convalecientes, personas con discapacidad o mujeres embarazadas, son especialmente vulnerables a la soledad y el impacto social de la pandemia.
Sin embargo, la teleasistencia surge como una herramienta idónea para saber que estás acompañado y recibir ayuda ante cualquier adversidad, por mínima que sea. “Se trata de un servicio que te ayuda siempre de manera eficaz y rápida en cualquier momento; una opción ideal para ofrecer compañía y atención a cualquier persona en su domicilio”, según los especialistas.
Una modalidad de asistencia que ofrece atención continua e inmediata para el día a día y ante cualquier situación de peligro o inseguridad: caídas, accidentes, infartos o incendios, circunstancias en las que los usuarios pueden pulsar el botón SOS para emergencias que avisa de forma directa al Centro de Atención.
En ese sentido, con una instalación rápida y sencilla, el usuario está permanentemente conectado con ese Centro de Atención, profesionales con los que se puede comunicar directamente ante cualquier eventualidad pulsando el botón del colgante o pulsera para que se ponga en marcha de manera inmediata la ayuda necesaria.