Asistencia psicológica en lengua de signos para el Covid-19
Personas sordas de toda España podrán ser atendidas en lengua de signos por el servicio gratuito de atención psicológica de la red CNSE, prestado a través de videoconferencia o chat y adaptado a las necesidades comunicativas de cada persona sorda.
El confinamiento, la desescalada y casi tres meses de crisis sanitaria deja factura en muchos de nosotros. Para hacer frente a situaciones derivadas del COVID-19 que afectan a personas sordas de todo el país, la CNSE (Confederación Estatal de Personas Sordas) y su red asociativa han implementado un servicio de asistencia psicológica.
Profesionales de la Federación de Personas Sordas de Galicia (FAXPG), de la Agrupación de Personas Sordas de Zaragoza y Aragón (ASZA); de la Federación de Personas Sordas de las Islas Canarias (FASICAN); y de la Fundación CNSE llevan a cabo esta atención que ofrece un valor añadido.
«A través de nuestra red, las personas sordas pueden ser atendidas directamente en lengua de signos o en la modalidad comunicativa que requieran. Además, cuentan con psicólogas y psicólogos con un amplio conocimiento de la comunidad sorda», afirma la presidenta de la CNSE, Concha Díaz.
El servicio, que se presta gratuitamente a través de videoconferencia o chat, está dirigido principalmente a aquellas personas sordas contagiadas de coronavirus o que estén expuestas al contagio; personas sordas con patologías previas y mayor riesgo de afectación; personas sordas con familiares fallecidos por esta enfermedad; y personas sordas que se encuentren en una situación de aislamiento derivada del coronavirus como es el caso de las personas mayores sordas.
«Si la pandemia es psicológicamente difícil de sobrellevar para la población en general, para las personas sordas, y muy especialmente para los mayores sordos, lo es más dada la falta de contenidos de cultura y de ocio accesibles en las propias televisiones públicas y privadas», señala la presidenta de la CNSE.
Barreras en todos los ámbitos
A esta cuestión, suma otras como la saturación de los hospitales, las elevadas cifras de enfermos y fallecidos, o la inestabilidad laboral y económica sobrevenida a raíz de esta crisis global. Situaciones que, según manifiesta, «preocupan a cualquiera, cuanto más a quienes encontramos barreras para acceder a los servicios públicos, a la atención sanitaria y a la información y la comunicación».
Para Díaz, la ansiedad que genera dicha falta de accesibilidad está siendo el denominador común de la mayor parte de los casos que atiende este equipo de psicólogos de la red CNSE. «Si bien existen recursos como los intérpretes de lengua de signos o la plataforma de videointerpretación SVIsual que permiten esta comunicación accesible, en la práctica se olvidan de utilizarlos e incluso se nos niega su uso».
En esta línea, la CNSE ha puesto a disposición de la Fundación Psicología sin Fronteras dicho servicio de videointerpretación, que permite la comunicación a distancia y en tiempo real entre personas sordas y oyentes tanto en lengua de signos, como signo y voz, o texto escrito.
«Con esta iniciativa, se quiere reforzar el acceso de este colectivo y sus familias a los servicios de salud mental, dado que la mayoría de los servicios surgidos a raíz de esta crisis sanitaria, se prestan telefónicamente o a través de fórmulas que no son viables para la población sorda», indica Díaz.