“Queda mucho camino por recorrer en la accesibilidad para personas con sordera o hipoacusia”
Con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, AG Bell International asegura que las personas sordas en tiempos de coronavirus “son las olvidadas de todos”.
Este 4 de diciembre hace tres años que venció el plazo que concedía la Ley General de Derechos de Personas con Discapacidad y de su Inclusión Social para que todos los productos, bienes, entornos y servicios fueran accesibles. “Sin demasiados avances. Y para colmo, la pandemia de coronavirus ha levantado aún más barreras”, según AG Bell International.
Esta institución ha aprovechado la celebración del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, para “exigir que se cumplan las condiciones de accesibilidad y no discriminación”.
“Queda mucho camino por recorrer en la accesibilidad para personas con sordera o hipoacusia en edificios, webs, cines, teatros, museos, hoteles u hospitales. La crisis social generada por la COVID-19 ha puesto en evidencia esta situación”, afirma Svante Borjesson, director general de AG Bell International.
Aplicando los porcentajes de personas con problemas de audición en países de nuestro entorno, en España hay casi 7 millones de personas que precisan medidas que faciliten el acceso a la información en el entorno educativo, sanitario y en general en todos los aspectos de su vida cotidiana.
“El uso de las mascarillas perjudica especialmente a personas con sordera e hipoacusia, porque no pueden beneficiarse de la lectura labial si la precisan. Las mascarillas y las pantallas faciales atenúan y deterioran la señal acústica. Los expertos cifran entre 3 y 7 decibelios (dB) la reducción de la intensidad de la voz con las diferentes mascarillas y hasta 20dB si el interlocutor además utiliza una pantalla facial”, explican.
“Las personas con pérdida auditiva que lo precisen tienen que poder acceder a los servicios públicos de atención telefónica mediante videollamadas”, señala Svante Borjesson, quien añade que toda la información sobre el coronavirus en las distintas televisiones tiene que estar subtitulada.
La pandemia
Además, para esta entidad, las restricciones a los movimientos y el estancamiento de la vida económica y social han provocado el aumento de la brecha digital, en opinión de los expertos, sobre todo entre los niños y los mayores.
“La carencia de herramientas o conocimientos del mundo digital ahonda las diferencias, brecha que se ha agrandado en el caso de los estudiantes con discapacidad auditiva. La accesibilidad no es ni mucho menos total. En lo que respecta al acceso a la educación, no todos los materiales audiovisuales son accesibles porque les falta el subtitulado. Además, los alumnos con discapacidad auditiva tienen que enfrentarse a actividades con audios o videollamadas de cierta complejidad”, concluyen desde AG Bell.