Un anuncio que se ve a ciegas
The Darkest Room, el único escape room del mundo que transcurre en la oscuridad, lanza un spot 360º que rompe barreras entre los sentidos y construye un mundo de posibilidades para las personas con discapacidad visual.
En plena moda de los escape room, The Darkest Room se ha lanzado a una ‘aventura’ inmersiva e inclusiva, ya que a su singularidad de ser la única experiencia de este tipo que se desarrolla completamente en la oscuridad, ahora suma el primer anuncio 360° que exige que el usuario esté a oscuras.
“Este escape room nace de la idea de romper las barreras que la visión construye en torno al resto de sentidos impidiéndoles desarrollar todo su potencial”, explica Víctor Arcas, socio fundador de esta firma.
“Queríamos ofrecer una experiencia diferente y creo que lo hemos conseguido: con los ojos vendados la sensación de estar encerrado se intensifica y escapar deja de ser un simple objetivo para convertirse en una necesidad”, asegura Arcas.
En ese contexto, destaca la posibilidad que brinda este proyecto a las personas con discapacidad visual, que pueden disfrutar de la experiencia de la misma manera que el resto de usuarios.
“No ver para poder ver mejor lo que no se encuentra a simple vista”, partiendo de este “oscuro insight” los creativos Iban Retegi y César Pérez lo han visto claro y, para promocionarlo, han desarrollado el primer anuncio que se ve a ciegas.
“El secreto está en los grises”
“Cuando ves una escena oscura de una película y estás en una habitación con mucha luz, no se distingue nada a no ser que cierres la ventana; pues con este anuncio sucede lo mismo. Es necesario privarse de toda luz para encontrar el código que hemos escondido. El secreto está en los grises”, explica.
Un secreto que es también el primer reto del juego en el que participa cada espectador desde el mismo momento de su visionado. Y es que el usuario deja de ser un consumidor pasivo para convertirse en el jugador que deberá resolver esta primera pista buscando a oscuras a su alrededor. Una mecánica que, según asegura Pérez, “ayuda a concienciar sobre las dificultades que tiene una persona con visión reducida”.
“Estamos recibiendo comentarios muy positivos de nuestros clientes y queremos abrir otra sala dentro de nuestras instalaciones que ofrezca una aventura nueva”, anuncia Arcas.
