Juan Antonio Valle, de Emérita Augusta a Tokio
Fan de Craviotto, amante de las series y el mundo del motor y apasionado de su tierra, el piragüista de Mérida sueña con una medalla olímpica.
Se ha criado junto al río Guadiana y ello le ha marcado la vida. El piragüista extremeño Juan Antonio Valle estará en la próxima gran cita de los Juegos Paralímpicos de Tokio. Él, junto a Higinio Rivero, ya consiguieron la plaza antes del parón competitivo por culpa del coronavirus. Entretanto, este vecino ilustre de Mérida desvela su lado más personal.
Colgarse un metal
Sobre sus iconos, Valle, que no se queda con un solo referente en el mundo del deporte, admite que se fija mucho «en la técnica de los mejores palistas del mundo, sobre todo de mi modalidad de sprint, y por supuesto uno de ellos Saúl Craviotto, que es un gran referente para nuestro deporte, tanto a nivel nacional como internacional».
Y con la mirada puesta en Tokio, el emeritense es consciente de la dificultad, pero tiene claro que «quiero luchar por una medalla. Sé que estoy cerca de ello y lo puedo conseguir», asegura en las redes sociales del Comité Paralímpico Español.
Algo más de un año tiene por delante Juan Antonio Valle para trabajar y luchar por ese objetivo que tiene entre ceja y ceja, subir al podio de los Juegos de Tokio.